Con el objetivo de fortalecer la identidad cultural y espiritual de los adolescentes en proceso de reinserción, la escuela Inapewma, en conjunto con el equipo socioeducativo del Centro de Internación Provisoria e Internación en Régimen Cerrado de Coquimbo, organizó una significativa ceremonia para conmemorar el We Tripantu.
La actividad, realizada en el marco de las acciones formativas del centro dependiente del Servicio Nacional de Reinserción Social Juvenil, reunió a jóvenes, educadores y funcionarios en un espacio de encuentro, reflexión y renovación espiritual. La ceremonia no solo marcó el inicio de un nuevo ciclo, sino que también promovió el respeto por las raíces culturales, el sentido de comunidad y la valoración de la diversidad.
Loreto Rebolledo, directora regional del servicio en Coquimbo, destacó la importancia de este tipo de iniciativas: “La conmemoración del We Tripantu en el centro de justicia juvenil representa mucho más que una ceremonia ancestral: es un acto profundo de conexión, identidad y esperanza. Este nuevo ciclo que celebramos junto a los jóvenes es también una oportunidad para renovar sus vínculos con la historia, con sus raíces y con la comunidad. Agradezco profundamente el compromiso de quienes hicieron posible esta jornada. Creemos firmemente que la reinserción se construye también desde el respeto y la valoración de la diversidad cultural. Hoy, más que nunca, reafirmamos nuestro compromiso con una reinserción integral, humana y con sentido”.
Por su parte, Claudio Mora, director del recinto, enfatizó el enfoque educativo de la celebración: “Esta actividad forma parte del trabajo colaborativo que llevamos adelante junto a la escuela y el equipo socioeducativo del centro. Se integra al currículum escolar, especialmente en la asignatura de Historia, a través de metodologías lúdicas y experienciales que permiten a los jóvenes adquirir conocimientos significativos. En esta ocasión, el We Tripantu se abordó como una celebración de gran valor para los pueblos originarios, marcando el cambio de ciclo y el paso del otoño al invierno. A través del propio ritual buscamos que los jóvenes comprendan y valoren su profundo sentido cultural y espiritual”.
La jornada fue acompañada por la agrupación Tinkus Machas La Serena, quienes con su vibrante presentación llenaron de color, energía y tradición la ceremonia, aportando un componente artístico que enriqueció aún más esta experiencia de encuentro intercultural.